|
LA MAYORIA OFICIALISTA DEL CNE SE PUSO AL MARGEN DE LA LEY. EL PAIS SE ENCAMINA A LA CRISIS INSTITUCIONAL GENERALIZADA
24/2/2004
Venezolanas, venezolanos:
Hoy 24 de febrero de 2004 pasará a la historia
como el día de la estafa. En el día de hoy la
mayoría pro-oficialista del Consejo Nacional
Electoral ha consumado un gravísimo fraude contra
la Constitución, contra la Ley, contra el
Reglamento elaborado por ellos mismos y –lo que es
más grave- contra la soberanía popular.
Hoy esa pírrica mayoría, siguiendo instrucciones
dadas públicamente por voceros del Ejecutivo
Nacional y haciendo uso abusivo de un poder
provisional, ha violado el artículo 62 de la
Constitución Nacional, que establece que los
ciudadanos tenemos el derecho de participar
LIBREMENTE en los asuntos públicos.
Violaron el artículo 63, que consagra al sufragio
como un DERECHO CIUDADANO.
Violaron el artículo 66, que plantea que tenemos
derecho a que nuestros representantes RINDAN
CUENTA de su gestión.
Violaron el artículo 72, que establece claramente
que todos los cargos o magistraturas de elección
popular, INCLUYENDO LA PRESIDENCIA DE LA
REPÚBLICA, son revocables.
Violaron el artículo 22 del Reglamento de
Referendo, que establece que son la firma y la
huella Y NO LA CALIGRAFIA DE LOS DATOS lo que hace
“personalísima” la voluntad del elector.
Violaron el artículo 29 de ese mismo Reglamento,
que establece los causales por los cuales una
firma puede ser “puesta en observación” o
invalidada, Y QUE NO INCLUYE ENTRE TALES CAUSALES
LAS SUPUESTAS “PLANILLAS PLANAS”.
Violaron principios básicos del derecho
constitucional reconocidos internacionalmente,
como el que establece que las culpas de la
administración no se pueden trasladar a los
ciudadanos; el que establece que los tecnicismos
excesivos no pueden estar por encima de la
voluntad ciudadana y el que establece la no
retroactividad de la Ley.
Violaron el aparte 12 del acuerdo firmado el 29 de
mayo del 2003 en la Mesa de Negociación, acuerdo
que tiene como garantes a la OEA, Centro Carter y
a las Naciones Unidas y que establece, en este
doceavo punto, que la salida a la crisis
venezolana deberá estar inscrita en el referendo
revocatorio previsto en el articulo 72 de la
Constitución, con lo cual se han puesto de
espaldas a la resolución 833 del Consejo
Permanente de la OE.
Violaron el artículo 21 de la Carta Democrática
Interamericana, al hacer infructuosas las
gestiones diplomáticas de la Misión de Observación
de la OEA y el Centro Carter.
La Constitución Nacional establece que la
soberanía reside en el pueblo. Esa mayoría
oficialista del CNE, obedeciendo a los intereses
políticos del oficialismo, ha maniobrado para
impedir que la soberanía popular pueda expresarse
en forma pacífica, democrática, electoral y
constitucional. Con ello, han atentado gravemente
contra la paz de la República y contra la
gobernabilidad democrática. En consecuencia, la
Coordinadora Democrática, instancia representativa
de la oposición venezolana reconocida por la OEA y
firmante de los acuerdos del 29 de mayo, anuncia
lo siguiente:
1) Rechazamos las normas que arbitrariamente ha
decidido la exigua mayoría oficialista del CNE,
que han alterado las reglas del proceso cuando
este ya se encuentra en etapa avanzada, para así
impedirlo y sabotearlo.
2) Desconocemos la autoridad institucional,
política y moral de la mayoría oficialista en el
CNE que se ha colocado de espaldas a la
Constitución y al pueblo. Por ello, señalamos que
–hasta tanto no se produzca una profunda
rectificación de los terribles errores en que
incurrieron en el día de hoy- los integrantes de
esa mayoría no serán reconocidos por la oposición
venezolana como calificados para la conducción de
proceso electoral alguno.
3) Denunciamos la directa correspondencia entre la
nefasta decisión de la mayoría oficialista del CNE
y las instrucciones giradas en forma pública en
diversas oportunidades por diversos voceros del
actual régimen. En consecuencia, esta absurda
decisión no sólo descalifica a la mayoría
oficialista del CNE, sino que además deslegitima
al Gobierno. Desde las alturas del Poder Ejecutivo
y usando al CNE como instrumento, se ha producido
un golpe de estado contra la Constitución y contra
la soberanía popular. En consecuencia, el Gobierno
Nacional ha perdido su precaria legitimidad pues,
aunque tuvo su origen en un acto electoral, ha
maniobrado para evitar que la voluntad electoral
se exprese libremente sobre su permanencia en el
poder, tal como lo establece la Constitución
Nacional.
4) Respaldamos la posición asumida por la Misión
de Observadores de la OEA, apoyamos su propuesta
de instrumentar un estudio muestral para solventar
las diferencias de opinión en relación a las
planillas que presenten caligrafía similar, y les
instamos para que junto al Centro Carter, a la
Organización de las Naciones Unidas, a la Unión
Europea, a los presidentes del Grupo de Países
Amigos y del G15 y a todos los demás actores de la
comunidad internacional ejerzan toda la presión
moral, jurídica e institucional que sea posible a
fin de lograr que el actual régimen retroceda en
su empeño de violar la Constitución Nacional y se
someta al dictado de la soberanía popular.
5) Exhortamos a todos los venezolanos de vocación
democrática que ocupan y ejercen espacios
institucionales en el CNE, Asamblea Nacional,
Consejos Legislativos Regionales, Consejos
Municipales, sindicatos, gremios, etc., a utilizar
tales espacios para denunciar de manera firme y
beligerante el fraude perpetrado contra la
voluntad ciudadana, y hacer que la actividad de
tales organismos este centrada en este tema hasta
que se produzca el restablecimiento pleno de la
legalidad democrática en el proceso revocatorio
venezolano.
6) Llamamos a todos los ciudadanos a iniciar
acciones de resistencia pacífica frente a las
órdenes de las autoridades de un gobierno que ha
perdido lo que le quedaba de legitimidad. En
función de ello convocamos a que se realicen de
inmediato Asambleas de Ciudadanos en todo el país
para discutir la actual situación, programar para
mañana mismo protestas pacíficas, firmes y
contundentes en los respectivos espacios vecinales
(barrios, urbanizaciones, calles, avenidas,
escaleras, plazas, semáforos, etc.), y organizar
su participación en las acciones masivas para
denunciar ante los presidentes del Grupo de los 15
el fraude cometido por la mayoría pro oficialista
del CNE y por el gobierno contra la voluntad
popular.
7) Convocamos urgentemente a una reunión de la
dirigencia de toda la sociedad democrática
venezolana. La situación que estamos enfrentando
no es un problema de “la oposición”, sino del
país. Por ello convocamos respetuosamente a los
gobernadores, alcaldes, diputados a la Asamblea
Nacional, al Comité Ejecutivo en pleno de la CTV,
al Directorio de FEDECAMARAS, a los dirigentes de
la sociedad civil organizada, a los integrantes de
las direcciones nacionales de los partidos
políticos, entre otros actores, a una reunión que
con carácter de urgencia se realizará mañana
miércoles 25 en horas de la tarde, en la que se
ultimaremos los detalles del plan estratégico que
la oposición tiene previsto para esta
circunstancia y se fijará la conducta a seguir por
los demócratas venezolanos en la severa crisis
institucional producida por el zarpazo del
oficialismo contra la voluntad popular.
Venezolanas, venezolanos:
Se han iniciado tiempos que pueden ser muy duros,
tiempos que responsablemente habíamos previsto.
Sabíamos de la vocación totalitaria y
antidemocrática del régimen y a pesar de eso, por
ser nosotros demócratas convencidos, aceptamos
todas y cada una de las normas que nos impusieron.
JUGANDO CON SUS REGLAS LOS DERROTAMOS, Y DE ESO
SON TESTIGOS LOS OBSERVADORES INTERNACIONALES, LA
FUERZA ARMADA NACIONAL Y LOS MISMOS HUMILDES
TESTIGOS DEL OFICIALISMO, QUE PRESENCIARON LA
FORMA LIMPIA Y CLARA EN QUE SE EXPRESÓ LA VOLUNTAD
MAYORITARIA DEL PUEBLO DEMOCRATICO VENEZOLANO.
Hoy, martes de carnaval, es el día que
paradójicamente escogió el régimen para quitarse
la careta. El oficialismo y sus agentes
electorales le han dado una patada a la mesa
democrática y con ello lo único que han logrado es
precipitar el principio del fin de este gobierno,
transformado ya abiertamente en régimen de fuerza
que pisotea la ley y la Constitución.
Frente a estas decisiones y acciones ilegítimas
está todo un país de gente digna, hombres y
mujeres decentes, jóvenes y viejos decididos,
civiles y militares honestos, dispuestos a cumplir
y hacer cumplir la Constitución. Un país que va a
seguir luchando para derrotar la trampa y para
lograr el restablecimiento de la legalidad en el
proceso revocatorio, es decir, para lograr que el
Referendo Revocatorio se realice de acuerdo con
las reglas originales decididas el pasado 20 de
noviembre y avaladas por la comunidad
internacional. Un país que va seguir luchando por
revocar el hambre, el desempleo, por alcanzar
salud, trabajo, vivienda y educación para todos.
Las desesperadas maniobras del gobierno quieren
desmoralizarnos. No les demos ese gusto.
Fortalezcamos nuestro espíritu y nuestro cuerpo
para resistir esta lucha, que daremos hasta el
final. Tenemos la razón, somos la mayoría, tenemos
la ley de nuestra parte y contamos con el apoyo
del mundo. Que Dios bendiga la libertad y la
democracia: ¡Esta batalla continúa, y la vamos a
ganar!
COORDINADORA DEMOCRATICA DE VENEZUELA