DECLARACION
DEL SECRETARIO GENERAL DE LA
ORGANIZACION DE LOS ESTADOS AMERICANOS (OEA),
CESAR GAVIRIA
Washington Mayo 27 2004
He tenido conocimiento de las declaraciones del Señor Vicepresidente de la Republica Don José Vicente Rangel en relación con las expresiones del Subsecretario de Asuntos Hemisféricos de los Estados Unidos publicadas en un artículo de prensa, así como también acerca de la dirección de nuestra Misión en Venezuela.
En primer lugar quiero expresar mi mayor respeto y consideración por el Vicepresidente Rangel y reconozco la labor dedicada y patriótica que cumplió en la Mesa de Negociación y Acuerdos que nos permitió llegar a los Acuerdos de Mayo del 2003, los cuales han propiciado un periodo de menos conflictividad política en el país. Estamos en pleno desarrollo de esos Acuerdos y en aplicación del artículo 72 de la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela.
Hemos sido invitados por el Consejo Nacional Electoral, con el asentimiento del Gobierno del presidente Chávez, al periodo de la recolección de firmas promovido tanto por partidos que lo respaldan como por la oposición representada en la Coordinadora Democrática. En múltiples comunicados hemos expresado el acatamiento de las decisiones del Consejo Nacional Electoral.
Como lo dije ayer, en algunas ocasiones hemos discrepado de criterios usados por el Consejo Nacional Electoral. Algunos de esos desacuerdos se han tramitado de manera privada con el Consejo y otros han sido de conocimiento público como parte de nuestra misión de mantener informado al Consejo Nacional Electoral, a los ciudadanos venezolanos y a la Comunidad Internacional.
Como lo señalé también en mi misiva de ayer, me he propuesto darle prioridad a las quejas del comando Ayacucho y de los miembros de enlace y para ello estaré disponible desde mañana al mediodía cuando llegue al país. Las misiones de Observación gozan, según el articulo 24 de la Carta Democrática, de autonomía e independencia. El Secretario general de la OEA tendrá que conocer los hechos a que se hacen referencia para tomar una decisión ilustrada sobre su pertinencia.
En todo caso, al llegar en el día de mañana a Caracas asumo automáticamente la dirección de nuestra Misión y me propongo permanecer en el país en la etapa de reparos y hasta que se produzcan los resultados por parte del Consejo Nacional Electoral. Hemos sido enfáticos en manifestar que nuestras observaciones no se pueden interpretar en menoscabo de las facultades constitucionales o legales del Consejo.
Como lo señalamos recientemente en un comunicado con el Centro Carter, la Misión Conjunta no tiene autoridad sobre el desarrollo o la dirección de los procesos electorales y sus evaluaciones y recomendaciones no son vinculantes. Como en todas las Misiones Electorales llevadas a cabo por la OEA y el Centro Carter, sus observaciones se realizan de manera imparcial y al margen de influencia de cualquiera de los actores.
Creo que estas referencias son suficientes para establecer cual es nuestra posición sobre el proceso de reparos de las firmas para los procesos revocatorios en desarrollo. No es nuestra función comentar las posiciones que asuman voceros de las Cancillerías de los países miembros, pero lo que sí podemos asegurar es que nuestras opiniones se harán con la misma neutralidad e imparcialidad con la que hemos actuado en los casi dos años que llevamos colaborando con el país.