PARALELISMO CAP-CHAVEZ
Existe un notable paralelismo entre dos de los más polémicos presidentes de la moderna era democrática de Venezuela. Carlos Andrés Pérez fue el Presidente más viajero....hasta que llegó Chávez. En 1979, Venezuela compró un avión Boeing 727 para uso presidencial de CAP. Ahora Chávez volará en un jet Airbus 319CJ, a un costo superior a $40 MM. Ambos presidentes pretendieron ser líderes autonombrados del Tercer Mundo y campeones de la integración latinoamericana. Ambos abogaron por una salida al mar para Bolivia. CAP incluso regaló un barco a dicho país, en un inútil gesto de solidaridad simbólica. Chávez provocó protesta diplomática formal de Chile por traer el asunto a la atención de la reciente cumbre en Brasilia. CAP se embriagó del proyecto de la Gran Venezuela. Chávez fue aún más lejos; en su incapacidad para mejorar las instituciones, decidió destruirlas (incluyendo la Constitución de 1961) comenzando de nuevo desde cero, mediante la creación de la V República (en apelativo Bolivariana fue un innecesario capricho chavista que ni quita ni pone nada excepto rendir culto al ego de Chávez). Ambos presidentes comparten una característica común de querer robarse el show en cualquier ocasión, lo que demuestra sus descomunales egos. La proverbial vanidad venezolana halla su mejor expresión en ambos presidentes. Vanagloriándose de la riqueza petrolera, CAP estableció el Acuerdo de San José para suministrar petróleo a los países de Centroamérica y el Caribe a precios especiales y fáciles condiciones crediticias. Incapaz de controlar dicho pacto por la presencia del copatrocinador México, Chávez creó su propio pacto paralelo para proporcionar petróleo a esos países en condiciones incluso mejores, añadiendo a Cuba. CAP gozó de apoyo sindical entusiasta. La CTV fue tradicionalmente un baluarte de AD, de la cual el partido obtuvo gran cantidad de votos. Careciendo de tal brazo político (que necesita mucho para redondearse su base de poder, debido a la lealtad del movimiento sindical organizado al partido AD) Chávez trata de enterrar la CTV bajo la cual prosperaron las libertades democráticas, y crear su propia organización laboral. Reconociendo la dificultad de ganarse el apoyo laboral, Chávez escogió la manera fácil de desatar el nudo gordiano y comenzar con el pizarrón limpio eliminando todo lo que huela a la IV República creando al mismo tiempo su movimiento sindical dócil y maleable a sus designios políticos. Aquí termina el paralelismo. Por medios legales y democráticos, CAP trató de encarrilar la economía venezolana con Miguelito Rodríguez y su difamado paquete, cuyo plan empezaba a mostrar resultados positivos cuando fue violentamente abortado por el sangriento golpe chavista de Feb. 1992. Después de casi 20 meses de gobierno absolutista, blandiendo un poder sin precedentes, los únicos resultados que puede mostrar Chávez son negativos. Las dimensiones verdaderas de la tragedia se harán visibles al agotarse la actual bonanzas petrolera.
Revista Económica
Venezolana
2004.09.20