Pronunciamiento
Varios oficiales de la Fuerza Armada de Venezuela
Martes 22 de octubre de 2002
Documentos de los sucesos de abril de 2002 en Venezuela
Que el pueblo no puede obedecer a un gobierno que ha cometido crímenes de lesa
humanidad, como el monstruoso caso de Puente Llaguno aun no resuelto.
Que ha desencadenado la más brutal corrupción de la cual conocemos solo los más
sonados casos, como el del FIEM, el FUS, el Plan Bolívar 2000 y tantos otros en
ministerios y gobernaciones adictas al régimen.
Que ha triplicado la pobreza en este país, liquidando programas sociales,
prometiendo sin cumplir. Se ha allanado hogares de manera totalmente
injustificada.
Que ha penetrado y politizado a la Fuerza Armada Nacional buscando su
liquidación institucional para sustituirla por fuerzas paramilitares como es el
caso de los Círculos Bolivarianos.
Se ha atropellado a periodistas y dueños de medios, con su discurso y con
atentados directos a equipos e instalaciones físicas, llegando a asesinato de
comunicadores sociales.
Se ha atentado contra el derecho de propiedad, puesto de manifiesto en la Ley
Habilitante y la creación de las zonas de seguridad.
Se ha amenazado con expropiar infraestructura físicas de industrias y comercios
que no se adhieran a la Revolución Castro-Comunista. Se ha utilizado el
abominable sicariato político. Un gobierno que ha destruido el aparato
productivo creando un desempleo y subempleo jamás visto en el país y una
desinversión por inestabilidad política. Que a nivel internacional ha
despotricado contra nuestros socios y amigos tradicionales y que a cambio
establece lazos fuertes de compromiso con las FARC, el castro-comunismo, Libia e
Irak, entre otros.
Un gobierno que a través de su Presidente ha sembrado de manera programada y
perseverante, el odio entre los venezolanos. Que ha pretendido sembrar
diferencias raciales en un país mestizo e igualitario, como es el nuestro, a
través de un discurso descalificador, prepotente, grosero y autoritario.
Un gobierno, en fin, que enaltece y justifica la violencia y busca la lucha
fratricida.
Dadas las respuestas continuas de burlas, manipulación y desprecio del gobierno
a las manifestaciones masivas de protesta cívica de la sociedad venezolana, así
como la intermediación de organizaciones nacionales e internacionales tales como
la Comisión Tripartita Internacional, la mediación del Secretario General de la
Organización de Estados Americanos y a los racionales planteamientos de la
Nación entera para lograr rectificación.
REITERAMOS
La invocación del Artículo 350 de la Constitución y anunciamos nuestra
disposición a cumplir con el deber, como pueblo venezolano, y cito la
Constitución: «El pueblo de Venezuela fiel a su tradición republicana, a su
lucha por la independencia, la paz y la libertad, desconocerá cualquier régimen,
legislación o autoridad que contraríe los valores, principios y garantías
democráticas o menoscabe los derechos humanos».
Por lo tanto, reiteramos, la Fuerza Armada Nacional son democráticas y repudian
un golpe de estado o un autogolpe por parte del gobierno nacional.
Y DECLARAMOS:
Que para dar respuesta a las exigencias de la sociedad democrática, de la cual
también formamos parte, que masivamente exige la renuncia inmediata del
Presidente de la República y la relegitimación de los poderes públicos en los
términos constitucionales, para dar cumplimiento a lo establecido en la
Constitución que nos obliga a ser garantes del orden interno, de la defensa de
las instituciones y de la paz social y para evitar que continúe la constante
violación a la Constitución, leyes y demás normas de la República,
particularmente las arbitrariedades que amenazan con la destrucción de la Fuerza
Armada Nacional.
Nosotros, respaldamos el sentimiento de la mayoría de los habitantes del país,
sobre la cual se cierne la amenaza permanente de las milicias armadas del
gobierno, con la complicidad del Presidente de la República y de algunas
individualidades de la Fuerza Armada Nacional inmersas en un proyecto
revolucionario castrista que el país adversa y que es inconstitucional.
EN CONSECUENCIA:
Anunciamos nuestro pleno respaldo a la voluntad popular, concretada en la
extraordinaria marcha cívica realizada el pasado jueves 10 de octubre, y el
contundente paro cívico del día de ayer, a pesar de los intentos de represión y
saboteo de las milicias armadas, permitido por oficiales de la Fuerza Armada
Nacional que, en algún momento tendrán que responder por las reiteradas
violaciones a los derechos fundamentales de los ciudadanos.
Dicho lo anterior, anunciamos que nos declaramos en desobediencia legítima y
desconocemos el régimen actual.
Hacemos un llamado a todos los integrantes de nuestra Fuerza Armada Nacional a
que nos acompañen en esta misión, a todo lo ancho y largo de nuestra patria, y
especialmente a aquellos compañeros de armas que están en la jurisdicción del
Área Metropolitana de Caracas, que se presenten en la Plaza Altamira, la cual
declaramos desde ahora TERRITORIO LIBERADO DE LA FUERZA ARMADA NACIONAL
INSTITUCIONAL, para darle pleno respaldo a la voluntad popular, convocamos a la
sociedad civil y al pueblo en general a que se declare en desobediencia civil.
Todo lo anterior, nos obliga como ciudadanos venezolanos y miembros de la Fuerza
Armada Nacional en ejercicio de lo dispuesto en los artículos 350 y 333 de la
Constitución a desconocer el régimen autocrático y deslegitimado de Hugo Chávez
Frías, a fin de no convertirnos en cómplices de las violaciones de los derechos
humanos, a la libertad, a la democracia y al estado de derecho en Venezuela so
pena de afianzar esta dictadura en el poder, aceptar la impunidad frente a los
delitos de lesa humanidad y confiscar nuestro futuro y el de nuestros hijos.
Convocamos al pueblo venezolano a respaldar esta medida por todos los medios
posibles a su alcance e igualmente, exhortamos a la tropa, suboficiales,
cadetes, oficiales subalternos, oficiales superiores, generales y almirantes a
cumplir con la obligación que les impone el artículo 350 de la Constitución
Nacional y a sumarse a esta acción que no tiene otro fin que respetar la
legítima voluntad popular.
Exigimos al Alto Mando Militar, que cumpla con una responsabilidad histórica,
que respete la voluntad del pueblo y que no ejerzan acciones que conlleven a un
derramamiento de sangre entre miembros de la Fuerza Armada Nacional. Aún podemos
evitar una dura confrontación que no hemos provocado y no queremos.
Finalmente, le expresamos a este glorioso pueblo que tomó Caracas y las ciudades
del interior, a los hombres y mujeres que han visto limitados sus derechos
constitucionales, que tengan fe y confianza en su Fuerza Armada Nacional. No los
defraudaremos. Somos corazón y alma de este pueblo, que al entregarnos las armas
de la República fue para usarlas exclusivamente en su protección. Jamás
renunciaremos a ser los guardianes de la Patria para convertirnos en instrumento
de una parte enceguecida por el odio y los resentimientos, las desviaciones del
poder o ideologías incompatibles con los valores fundamentales del pueblo
venezolano.
Finalmente, invitamos a todos nuestros compañeros de armas, a que se nos unan en
esta Jornada por el rescate de nuestra institución. Somos parte de este pueblo,
hoy, la Fuerza Armada está dando un paso al frente. Venezolanos, ha llegado la
hora de terminar con esta tiranía y con esta dictadura.
G/D Enrique Medina Gómez
GB (EJ) René Sericia
GB (EJ) Rigoberto Martínez Vidal
GD (GN) Edgar Bolívar
GB (AV) Clinio Rodríguez
GD (GN) Carlso Alfonso Martínez
GB (GN) Óscar Máquez
CA Daniel Comisso Urdaneta
GD (EJ) José Félix Ruiz Guzmán
GD (GN) Felipe Rodríguez
VA Héctor Ramírez Pérez
CA Edgar Morillo
GB (AV) Pedro Pereira
GB (EJ) Néstor González González
Caracas 22 de octubre de 2002