La UNESCO pillada por un bribón
Olga K

Perder el prestigio en Territorio Libre de Analfabetismo

www.elgusanodeluz.com

Construir prestigio es una tarea dedicada y lenta. Perderlo es en cambio muy fácil. Demás está decir que con la pérdida del prestigio, se va al traste también el respeto que le acompaña. Los métodos universalmente reconocidos para caer en esta desgracia, mentir, trampear, traicionar y malas juntas, son los típicos y tienen en común la búsqueda de algún beneficio aunque sea pasajero; pero hay otra fórmula para perder el prestigio, la mas triste de todas y la mas lamentable: dejarse pillar por un bribón.

En la Venezuela bolivariana se ha desarrollado el mecanismo más eficiente e infalible para pulverizar cualquier reputación en un ras-plas. Contiene todos los anteriores y los potencia: retratarse con Chávez. Si usted es mencionado –apreciativamente- por el regordete comandante o endosa alguna de sus actuaciones, cae usted en irremontable desgracia.

La última víctima es –tristemente- la UNESCO, esa organización fundada el 16 de noviembre de 1945, que durante 60 años mantuvo una imagen im-pe-ca-ble, cae ahora en grotesca picada de desprestigio al declarar en cadena nacional y como noticia internacional que Venezuela es “territorio libre de analfabetismo”.

Debe uno preguntarse porqué Koïchiro Matsura, su director general pisó ese peine.

Porque una cosa es que Aristóbulo diga que la Misión Robinson alfabetizó a 1.500.000 venezolanos y otra muy distinta que Matsuura se lo crea así no más y lo endose al punto.

Sin comprobación, ni evaluación, ni verificación. Sin seriedad.

Chavistas y opositores por igual vimos –y podemos revisar tanto el video como la trascripción- el Alo Presidente #227 del 3 de Julio, 2005* transmitido desde el 23 de Enero donde se anunció lo que la UNESCO acaba de avalar. Matsuura no lo vio.

No vió la reveladora y verdadera imagen de este país en una preciosa criatura de 15 años, Alejandra Veliz, con su camisita rosada y la azorada sonrisa de saberse en cadena nacional quien no pudo leer, ni con la ayuda de Chávez, la palabra “Misión” en el diploma que estaba recibiendo por haber aprobado la Robinson I. La misma niña que a sus escasos 15 años, en lugar de estar estudiando en una escuela regular como le correspondería, hubo de ingresar al programa de alfabetización, porque el gobierno ha sido incapaz de ofrecerle una educación formal. Alejandra Veliz tenía apenas 8 años cuando empezó este gobierno y hoy, 7 años mas tarde en cadena nacional, la desvergüenza revolucionaria exhibe su inocencia y la somete al agravio de recibir la migaja de una Misión cuando merece una escuela y un futuro decente. Alejandra, a sus 15 años, apenas puede leer su propio nombre. Y la bella niña sonríe y sonríe. A ella nadie le ha dicho que lo merece todo y no migajas.

Eso es lo que avaló la UNESCO. Ese es el producto revolucionario que hoy inunda con más pancartas de mentiras el país.

Matsuro no se preguntó porqué las ancianas que se graduaban –las Marías- pudieron leer corrido, pero las jóvenes no pudieron hacerlo.

A Matsuro no le cruzó ni un mal pensamiento cuando una de las viejitas le reclamó cándidamente a Chávez que faltaban dos por leer en lo que luego se revelaría como un cuadro montado para el show dominical.

La UNESCO que declaró a Venezuela “Territorio Libre de Analfabetismo” no se percató cuando Viviana Medina, una cuasi adolescente y madre de un bebé de 5 años, tampoco puede leer el texto que le muestra Chávez y una fugaz imagen captura la intervención de alguien orientándola, y dándole una página impresa, con la torpeza del camarógrafo enfocando el texto que la joven lee de memoria...y ésta la traiciona contradiciendo su palabra la imagen del texto.

Navegando la página del organismo encuentro los 6 puntos de su agenda en educación y al respecto dice: “Measuring quality: this is a key challenge, so that we can say with more certainty where and how the quality of education is improving. We need better indicators and more of them, so that the different aspects of quality can be assessed”.

“Medir la calidad: es un reto clave para poder decir con certeza dónde y cómo la calidad de la educación está mejorando. Necesitamos mas y mejores indicadores de manera que podamos evaluar los diferentes aspectos de la calidad”.

Oscura nos queda la intención que hizo que prescindieran justamente de ese aspecto para declarar al nuestro, territorio libre de analfabetismo. ¿En la UNESCO no verificaron los datos suministrados por el gobierno? ¿No contrastan lo que dice el papel con la realidad?

A Matsuro y la UNESCO no pareció sorprenderles que cada lector, cumplida su parte del montaje, aprovechara el fugaz instante para pedir una “ayudita”...mi hijo no ha cobrado, mi hijo es diabético, mi casita se está cayendo, no tengo como poner a mi muchacho en la escuela, necesito la operación, la pensión no me alcanza, no tengo trabajo...

La UNESCO avala una gestión sin haberse molestado en hacer las evaluaciones por su cuenta y aceptó, cándidamente, la palabra de un bribón.

También se le pasó por alto a Matsuro el detalle del libro que autografió Chávez y cuyo titulo -que adicionalmente no pudo leer una de las graduandas, tiene un contenido tan devastador para esa cultura de la paz que promueve la UNESCO, en el- folleto propagandístico con el que envenenan la inocencia de mi país “El Golpe fascista en Venezuela”

Cabe preguntarse porqué avaló la UNESCO al gobierno bolivariano cuando Matsuro, sobreviviente de Hiroshima, escribió sobre la No-Violencia en educación, nada menos que lo siguiente:

“Yet it is well known that violence, fuelled by common ignorance, often stems from the rejection of others and the fear and even hatred of differences. It pits individuals, groups and cultures against one another, leading to withdrawal and escalating aggression. A healthy and balanced awareness of otherness, on the other hand, can be achieved only through peaceful dialogue. ”

“Sin embargo es bien conocido que la violencia, alimentada por la ignorancia, con frecuencia proviene del rechazo de otros y el miedo, e incluso el odio a las diferencias. Ella (la violencia) enfrenta a unos contra otros, individuos, grupos y culturas, conduciendo a una agresión en escalada. Una saludable y balanceada conciencia de la alteridad, por otra parte, puede ser alcanzada sólo a través del diálogo pacífico”.

Cuando la UNESCO se prestó al show mediático, lo hizo de espaldas a una realidad feroz que golpea en los papelitos, cartas y lamentos a un presidente que, cual César romano, ordena a Aristóbulo, a Ornela y a Haiman que “atiendan la petición”. Por lo menos ante las cámaras.

Si hubiera soluciones institucionales, nuestros compatriotas no tendrían que estar entregando papelitos doblados al presidente mediático. Si hubiera soluciones institucionales, Alejandra y Velina, estarían en una escuela formal. Si los funcionarios de la UNESCO se hubieran atenido a los principios de la organización, la revolución no estaría colocándose como galón, una nueva mentira.

La UNESCO cayó en la trampa. Antes le precedieron Carter, Gaviria, la OEA

A todos, la revolución chavista, les arrebató el prestigio y el respeto.

No señor Matsuro. No sólo no somos libres de analfabetismo. Somos presos de la mentira que un bribón montó y de la que usted también es ahora víctima.

Para nosotros se traduce en opresión, para usted, en desprestigio.

No hay consuelo porque tristemente, su desprestigio y el de los que lo precedieron, es nuestra desgracia.

El mal está hecho. Queden para su reflexión las propias palabras de la UNESCO. No requieren comentario.

“Education is also about developing behaviour based on positive values – understanding and respect for other people of all kinds, for their rights, for the natural world, for the past and the future”.

“La educación es también desarrollar comportamientos basados en valores positivos-comprensión y respeto por todos los hombres, por sus derechos, por la naturaleza, por el pasado y por el futuro”.

Olgak_a@cantv.net

* El video http://www.alopresidente.gob.ve/galVid.php  , para la trascripción, vayan a http://www.gobiernoenlinea.ve/docMgr/sharedfiles/Alo_Presidente_227.pdf  

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