Venezolanos en el  2005: Cincuenta Ejemplos de Éxito

 

Toto Aguerrevere

 

A las 12:36 de la madrugada del primero de enero de 2005, vino al mundo Gilberson José Pedrón Armas en la Maternidad Concepción Palacios. Si algún día le da curiosidad por buscar en los anaqueles de periódicos amarillentos lo que ocurrió en Venezuela  en el año de su nacimiento, quien ostenta la distinción de ser el primer caraqueño del 2005 muy probablemente leerá sobre las peripecias de una nación que se vio enmarañada de vaguadas y de crisis electorales pero que continuó arduamente en la búsqueda de la paz. Las portadas de las revistas políticas darán muestra de las principales figuras que aportaron su voz en este año para bien o para mal: el presidente Hugo Chávez, Carlos Ortega, Nicolás Maduro, María Corina Machado, Marta Colomina, Carlos Azpúrua, Nelson Mezherane, Jesse Chacón e incontables otros cuyas palabras y acciones nos desalentaron o nos hicieron más fuertes pero que hoy, al finalizar el año, lo vemos como un recuento de la historia que nos hace ser venezolanos y que nos traza un futuro del cual ya nos ocuparemos de vivir en enero.

 

Sin intención de apartar la realidad política, económica y social de la sociedad en la que nació, mi deseo es contarle a Gilberson Pedrón que el año en el que nació no fue malo. ¡Fue extraordinario! Este calificativo impera porque centenares de venezolanos insignes, algunos reconocidos en los medios y otros no, aportaron su granito de arena para poner el nombre de Venezuela bien en alto y darle a aquellos que no somos héroes, un sentimiento de oportunidad, de alegría y de ejemplificación. Quizás ellos no lo sientan así, pero gracias a ellos, alguien afuera piensa que los sueños sí se cumplen y que con tenacidad y disciplina se llega hasta el más infinito de los cielos. No están todos los que son – faltaría nombrarlos a cada uno de ustedes – pero he aquí un banal intento de decirle al joven Gilberson Pedrón que en Venezuela claro que se puede, y lo mejor de todo, es que se puede hacer más.

 

Comenzando la cosecha de éxitos, el boxeador, Lorenzo Parra defendió su título de los pesos mosca de la Asociación Mundial de Boxeo, trayendo nuevamente a Venezuela el galardón en esa categoría. Con más de dos millones de alumnos en su haber, la organización Fe y Alegría celebró por todo lo alto sus cincuenta años de existencia, como también lo hizo el voluntariado de la Universidad Católica Andrés Bello. En la Universidad de Harvard, siete universidades venezolanas se dieron cita para participar en el modelo de Naciones Unidas más importante del mundo, aplaudiendo a la delegación de la Universidad Simón Bolívar quien por tercer año consecutivo se adjudicó el premio a la Mejor Delegación Internacional. Igualmente por tercera vez consecutiva, Antonio Díaz se adjudicó el título en el Open de París de Kárate Do convirtiéndose en el primer atleta con más triunfos en la competencia francesa. En Alemania, el director Gustavo Dudamel fue distinguido al ser la primera persona del mundo en recibir el Anillo de Beethoven, premio creado por la Sociedad de Amigos del Festival Internacional de Beethoven de Bonn y en el Giro de Italia, el ciclista José Lujano levantó su trofeo celebrando su llegada en tercer lugar.

 

La creación de la Orden al Mérito Rafael Vidal Castro fue aprobada unánimemente en la Asamblea Nacional como distinción a nuestros atletas criollos y homenajear la impronta muerte de uno de nuestros más importantes nadadores olímpicos que perdimos absurdamente en el 2005. El artista Domingo De Lucía llamó la atención a los venezolanos sobre la falta de cuidado e interés en las obras públicas al cubrir con plástico la obra Fisicromía de Carlos Cruz-Diez en la Plaza Venezuela, haciendo énfasis en el deterioro de nuestros más preciadas obras dejando a los caraqueños con la conciencia de que no solamente perdimos al gran maestro Soto, sino que también vimos – y vemos -  como se perdió su Esfera Caracas en la autopista Francisco Fajardo. En Australia, Jesús García consiguió la medalla de oro en los XX Juegos Sordolímpicos en el lanzamiento de jabalina. Mientras el gobernador Jeb Bush nombraba al el ex diputado venezolano Isilio Arriaga como miembro de la Comisión Regional de Servicios Públicos del Estado de Florida, Rusia y Alemania también distinguían la labor de venezolanos con el nombramiento de Amilcar Maestre como Profesor Ad Honorem del Departamento de Neurología y Genética de la Academia de Ciencias Médicas de San Petersburgo y Horacio Venegas como editor asociado de la revista Pain en la Universidad de Jena, respectivamente. 

 

El país se exaltó con el vibrar de la música que resonó dentro y fuera de nuestras fronteras con la multiplicidad de artistas internacionales y nacionales en el Caracas Pop Festival y demás conciertos.  En Chile aplaudieron a Ricardo Montaner como anfitrión del Festival de Viña del Mar y en casa nos alegramos por las nominaciones de Franco de Vita, Los Amigos Invisibles, Oscar D'León y el dueto Bachá al Grammy Latino. El béisbol fue nuestro y mientras los aplausos iban en homenaje al retiro de Andrés Galárraga como tributo a sus veinticinco años de carrera,  la llegada al país de Johan Santana con el premio Cy Young   como mejor lanzador del 2004 rivalizaba con el triunfo de Oswaldo Guillén como Manager del Año, al llevar a las Medias Blancas de Chicago al triunfo en las Grandes Ligas estadounidenses, convirtiéndose en el primer manager venezolano en llegar a la final de una serie mundial.   Los hilares de la moda tejieron su página en la historia con los desfiles de moda en FiTCaR 2005 y en los predios de la Plaza Altamira. Internacionalmente, Hannibal Laguna se destacó en la Pasarela Gaudí del Barcelona Fashion Week, Carolina Herrera vistió a la Primera Dama, Laura Bush, para uno de los bailes inaugurales de la presidencia de George W. Bush y Ángel Sánchez, premiado en Venezuela con la Aguja de Oro, hizo lo suyo con la cantante Beyoncé y con la antítesis de la perfecta ama de casa, Eva Longoria.

 

La inclusión de Alejandro Chichero en el equipo de fútbol en Bulgaria incrementó la participación de venezolanos en las ligas europeas a nueve y la Vinotinto nos puso a pasos de la inclusión en el Mundial de Alemania. ¡Al Mundial que sí vamos es al Mundial de Basketball, gracias la medalla de bronce obtenida por de la delegación criolla en la V Copa de las Americas! Sin poder aguar la fiesta en ninguna parte del mundo, el ron venezolano Santa Teresa 1796 fue premiado nuevamente como el mejor ron en la guía de licores independiente Spirit Journal editada por el estadounidense Paul Pacult, ubicando al ron en el puesto 11 de los 110 mejores licores del mundo. En el campo de la ecología, la propuesta de Erick Quiroga fue avalada en las Naciones Unidas, al decretar el año 2007 como el "Año Internacional de la Capa de Ozono" y el avance médico venezolano lo liderizó el Centro Valenciano de Fertilidad y Esterilidad al lograr el primer embarazo por congelación de óvulos en el país. Hollywood llamó a Edgar Ramírez a sus puertas y las cotufas abundaron en los cines con la mirada entre dos películas venezolanas en competencia hacia un Oscar que no se materializó: 1888: El Extraordinario Viaje de la Santa Isabel de Alfredo Anzola y Secuestro Express de Johnathan Jakubowicz. Ésta última se convirtió en la segunda película más taquillera en la historia del cine venezolano y la primera en ser distribuida por Miramax Films. El Miss Venezuela dio sus frutos nuevamente posicionando al país de número uno en el ranking de testas coronadas mundialmente con la venezolana Alexandra Braun conquistando por primera vez, el título de Miss Tierra en Filipinas.

 

En España se deleitaron con las obras fotográficas de Maggy Navarro y Ángela Bonadiés en la muestra Madrid Abierto 2005, expuestas en paradas y autobuses de la ciudad madrileña.  En Italia, Raúl Padrón fue nombrado miembro de la Academia de Ciencias para el Mundo en Desarrollo y en el Palacio de las Academias en nuestra ciudad, Rafael Arraíz Lucca fue distinguido como individuo de número en la Academia Venezolana de la Lengua. Los paladares capitalinos saborearon por diez días los mejores talentos de futuros chef que prepararon nobles platillos en aras de adjudicarse el premio Eureka al Futuro Chef, cuya distinción recayó finalmente en Vanesa Mora y Fernando Silva, estudiantes del Centro de Estudios Gastronómicos. Omar Vizquel obtuvo su décimo guante de oro, Venezuela se impuso en los XV Juegos Deportivos Bolivarianos con 179 medallas de oro y en las profundidades del mar de Niza, el apneísta Carlos Coste llegó a los 105 metros obteniendo record mundial en la categoría libre. 

 

Son sólo cincuenta ejemplos. Pero son cincuenta huellas que marcaron un hito en la historia venezolana ya sea en el campo de la cultura, el deporte, la ciencia, la ecología o la belleza. Cincuenta pasos que abarcan, que mueven, que suenan, que despiertan. Cincuenta ejemplos de éxito que se lograron porque todos ellos se despertaron un día y dijeron "hoy voy a ser mejor que ayer". Lo lograron y son vivo testamento que Venezuela es un mar de posibilidades en donde la tenacidad y la disciplina son condiciones necesarias para lograr el éxito en cualquier área en la que se desempeñe. ¡Feliz Año 2006! ¡Que su sueño, y en consecuencia su éxito, sean causa de orgullo para todos los venezolanos!

 

Toto Aguerrevere

totoaguerrevere@gmail.com

n.a.  La elaboración de este artículo fue basado en artículos aparecidos a lo largo del año en el periódico El Universal.

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