CPJ 2000
VENEZUELA
LA ANTAGÓNICA 
RELACIÓN ENTRE LOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN y el presidente Hugo Chávez Frías, 
junto con algunos acontecimientos alarmantes en el marco legal, llevaron a la 
coordinadora del programa de las Américas del CPJ, Marylene Smeets, a viajar a 
Venezuela en octubre para investigar la situación. [Lea su 
reportaje especial sobre Venezuela.] 
El reportaje llega a la conclusión de que los ataques verbales del mandatario 
venezolano parecen haber dado a la población y a las autoridades una licencia 
para atacar a los periodistas. Los reporteros han sido hostigados física y 
verbalmente en varias oportunidades durante el año pasado. En dos ejemplos de lo 
que los venezolanos han denominado «terrorismo judicial», los tribunales han 
violado manifiestamente garantías del debido proceso legal en casos penales por 
difamación en los cuales tres periodistas se vieron obligados a esconderse para 
evitar ser arrestados injustificadamente.
Aunque persistieron temores, Chávez no recurrió a la represión abierta de los 
medios de comunicación el año pasado. A principios del 2000, un grupo de 
periodistas alarmados por la hostilidad de Chávez hacia la prensa creó una 
organización de apoyo llamada Asociación Civil Comunicación y Libertad (ACIL). 
Sin embargo, ACIL al parecer se encontraba inactiva a fines de año debido a que 
la censura temida por los periodistas no se había concretado.