Reporteros sin Fronteras, 2005.11.04
Toman como rehenes a periodistas en un campus universitario
Reporteros sin Fronteras condena con firmeza la toma de rehenes y la agresión
que, el 28 de octubre de 2005, sufrieron Alecia Rodríguez del Valle y Dorian
González, del diario regional Notitarde, y su chofer Jair Hurtado, mientras
hacían un reportaje sobre el campus de la Universidad de Carabobo, en Valencia
(oeste de Caracas).
“Resulta sorprendente que en un campus circulen armas de fuego y explosivos. Y
aun es más sorprendente que las autoridades universitarias se hayan enterado tan
tarde de la magnitud de la situación. Esperamos que una investigación en
profundidad sancione a los autores de la agresión contra el equipo de Notitarde,
y determine las responsabilidades y las negligencias que han llevado a tal clima
de violencia”, ha declarado Reporteros sin Fronteras.
En la mañana del 28 de octubre se descubrieron cinco explosivos de fabricación
casera en el campus de la Universidad de Carabobo. Uno de los explosivos,
escondido cerca de los locales del Rectorado, funcionó sin causar daños ni
víctimas. La pequeña bomba contenía panfletos contra el gobierno de Hugo Chávez,
con el slogan “No al comunismo castro-chavista”. La víspera, la rectora de la
universidad recibió amenazas telefónicas que aludían al atentado.
El mismo día, Alecia Rodríguez del Valle, los fotógrafos Dorian González y
Fernando Aguirre, de Notitarde, y su chofer Jair Hurtado, acudieron a la
Facultad de Ciencias Económicas y Sociales, donde habían aparecido cuatro de los
cinco explosivos. Poco antes de la llegada de los periodistas estalló una pelea
entre estudiantes. Dorian González empezó a sacar fotos de la escena pero varios
estudiantes, que se dieron cuenta de que les fotografiaban, intentaron agredir
al fotógrafo. Algunos llevaban puños, ha confirmado Notitarde a Reporteros sin
Fronteras. Dorian González consiguió escapar, lo mismo que su colega Fernando
Aguirre.
Entonces, los estudiantes armados tomaron como rehén a la periodista y al
chofer, y les amenazaron de muerte. Alecia Rodríguez del Valle quedó en libertad
después de que les dijera que pertenecía a un periódico de otro Estado.
Posteriormente, la periodista intentó conseguir la liberación del chofer, a
través del teléfono móvil. Un estudiante le advirtió : “Tienes cinco minutos
para entregarme al fotógrafo o los clichés, y si no pagarás las consecuencias.”
Finalmente, y al cabo de media hora de negociaciones, Jair Hurtado quedó en
libertad.
http://www.rsf.org/article.php3?id_article=15507