INTERPELACIÓN GENERAL GUAICAIPURO LAMEDA (primera parte)  (regreso)

ASAMBLEA NACIONAL
DE LA REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

COMISION ESPECIAL POLÍTICA

QUE INVESTIGA LOS HECHOS OCURRIDOS LOS DIAS 11,12,13 Y 14 DE ABRIL DE 2002

Interpelación: General Guaicaipuro Lameda
Día: 07-05-2002
Hora: 05:15 pm.

Presidente: Se reinicia la sesión, siguiente punto del Orden del Día ciudadana Secretaria.

Secretaria: Comparecencia del General Guaicaipuro Lameda.

Presidente: Artículo 222 el texto constitucional. La Asamblea Nacional podrá ejercer su función de control mediante los siguientes mecanismos. Las interpelaciones, las investigaciones, las preguntas, las autorizaciones y las aprobaciones parlamentarias previstas en esta Constitución y en la Ley, y mediante cualquier otro mecanismo que establezcan las leyes y su reglamento.

En ejercicio del control parlamentario podrán declarar la responsabilidad política de los funcionarios públicos o funcionarias públicas y solicitar al poder ciudadano que intente las sanciones a través a que haya lugar para ser efectiva tal responsabilidad.

Artículo 49: El debido proceso se aplicara a todas las actuaciones judiciales y administrativas, en consecuencia el literal dos, toda persona se presume inocente mientras no se pruebe lo contrario.

Titulo Tres: De los derechos humanos y garantías y los deberes. Capitulo Uno. Disposiciones Generales.

Artículo 19: El Estado garantizará a toda persona conforme al principio de progresividad y sin discriminación alguna el goce y ejercicio irrenunciable, indivisible e interdependiente de los derechos humanos, su respeto y garantía son obligatorios para los órganos del poder público de conformidad con esta Constitución, con los tratados sobre derechos humanos suscrito y ratificado por la república y con las leyes que los desarrollen.

Artículo 3 del Reglamento Interno de la Comisión. Cumplimiento de solemnidades. El Presidente y el Vicepresidente de la Comisión Especial tomarán las medidas necesarias para evitar las interferencias o interrupciones durante el desarrollo de las reuniones, así como cualquier conducta que atenté contra el espíritu de cordialidad y respeto que debe prevaler .

Artículo 8. Reglas especiales para las comparecencias. En la comparecencia de funcionarios públicos o particulares la Comisión Especial aplicará las siguientes reglas:

La Presidencia de la Comisión explicará la dinámica de la interpelación o comparecencia al interpelado, la razón y motivo de la misma.

El invitado a comparecer hará una disposición inicial por un tiempo no mayor de diez minutos, el cual podrá prorrogarse por un período igual.

Los diputados y diputadas miembros de la Comisión Especial tendrán preferencia a la hora de formular sus preguntas o hacer sus intervenciones .

La intervención de los diputados y diputadas que deseen formular preguntas no excederá de tres minutos, las cuales deberán ser consignadas por escrito.

El interpelado procederá a dar respuesta en forma sucesiva a las preguntas formuladas por los diputados y diputadas.

Para aclarar conceptos, repreguntar, o solicitarle informaciones complementarias sobre la materia objeto de la comparecencia, los diputados y diputadas tendrán un tiempo adicional que no excederá de tres minutos.

El interpelado tendrá un tiempo que no excederá de cinco minutos para responder a cada una de las preguntas que se le formulen en forma sucesiva, el cual podrá prorrogarse si la Plenaria de la Comisión Especial así lo decide.

Tiene la palabra el ciudadano Guaicaipuro Lameda.

General Guaicaipuro Lameda: Ciudadano diputado Edgar Zambrano Presidente de esta Comisión, señores diputados que la integran, demás diputados de la Asamblea Nacional, invitados asistentes a este evento.

En principio quiero agradecer la invitación de que fui objeto para comparecer a esta Comisión con el propósito de emitir mi opinión con respecto a los sucesos que ocurrieron en el país entre los días 11 y 14 de presente año, gracias.

No es fácil emitir una opinión sobre estos sucesos en diez minutos con una prorroga de 20, de 10 minutos para llevarlo a 20, pero trataré de emitir esa opinión de la manera mas sucinta posible y he pensado que algún fundamento teórico puedo utilizar para fundamentar mis opiniones.

Sin embargo, antes de comenzar con mi opinión quisiera señor Presidente que me permita consignar o entregarle a cada uno de los diputados integrantes de la Comisión, un folleto que conseguí en estos días, no sé si Berenice me ayuda a repartirlo.

Un folleto que creo que es bien interesante sobre todo si pensamos lo que el Libertador nos decía, que una de las responsabilidades más importantes de un gobierno era la felicidad de sus pueblos y en estos días me conseguí con unas personas que están promocionando este folletico, muy sencillo que dice, se titula "El Camino a la Felicidad". Una guía de sentido común para vivir mejor.

Es un libro que contiene unos veintiún preceptos que no son religiosos pero que de manera sucinta, sencilla, resumida habla de principios morales para la conducción de la vida, de la gente y que en estos momentos yo creo que son muy útiles y muy importantes para la forma como vivimos.

Incluso ahí hay un precepto el numero 10 que nos habla de los gobiernos que debemos apoyar y de la forma como los gobiernos prosperan en la medida los apoyos que reciben, y como los gobiernos dejan de recibir apoyo cuando en algún momento podrían tener mucho.

Y así aparte de mencionar el numero 10, les digo hay veintiún principios que son bien interesantes y que coinciden también con un pensamiento que expresa nuestro Libertador, cuando decía "que moral y luces son nuestras primeras necesidades".

Que creo que todavía esta vigente, moral y luces siguen siendo nuestras primeras necesidades, y creo que los sucesos que ocurrieron durante estos días nos dejaron ver que bastante falta nos hace apegarnos a esos principios del pensamiento de Bolívar.

Para dar inicio a mi opinión quisiera también entregar para la Comisión cuatro ejemplares de un trabajo que en el año 95 se ganó el premio Presidente de la República, un trabajo que de manera teórica explica cómo un sistema político puede llegar a una situación de desestabilización que podría terminar en guerra civil o golpe de Estado. Y que por hacer un estudio metódico, sistemático, de las diferentes variables que influyen sobre los fenómenos sociopolíticos en la dirección de una sociedad, se vale de la teoría de sistemas, dado a que la complejidad de los problemas sociopolíticos no pueden ser estudiados por mecanismos sencillos, sino que tienen que ir a fundamentaciones teóricas que se identifiquen con la complejidad del problema que se trata de estudiar.

Lo que básicamente dice este trabajo es que, "si nos apegamos a la teoría de sistemas, la estructura de procesamiento que tiene que ver con todos esos insumos que están destinados a producir la felicidad de una sociedad, es responsable de administrar los recursos de una nación para satisfacer demandas sociales y para contrarrestar amenazas. Y en la medida que esa estructura de procesamiento, que tiene como nudo central el gobierno, hace bien el trabajo, se produce un grado de satisfacción que cada día da progreso y bienestar para la sociedad. Pero en la medida en que la combinación de recursos para atender demandas sociales y contrarrestar amenazas comienza a hacerse ineficiente, se dispara un circuito de intercambio entre el mismo sistema de procesamiento, o gobierno, y el entorno, o ambiente y la sociedad, que construye amenazas sobre sí mismo y esas amenazas comienzan a manifestarse por medio de protestas violentas que ingresan nuevamente a la estructura de procesamiento. Allí se puede producir un circuito que se alimenta a sí mismo, dado la incapacidad del gobierno para contrarrestar el efecto de las amenazas que se presentan sobre la sociedad, y las protestas comienzan a incrementar su nivel de violencia, y en la medida en que el subsistema de gobierno sea incapaz de procesar adecuadamente esas amenazas que van creciendo, ya las amenazas dejan de ser un insumo para el gobierno y pasan a ser un elemento que atenta contra el status quo. Y si esas protestas violentas son incapaces de romper el status quo, una sociedad puede caer en una guerra civil". Eso es lo que dice básicamente el trabajo. Eso es, creo que harto conocido por quienes conocen de política, y yo en esto apenas estoy comenzando a incursionar.

Pero lo que nos dice es que, frente a la situación que ocurrió entre el día 11 y 14, manejar el reduccionismo que nos lleva a ver los eventos particulares del día, nos hace perder la esencia y el fondo del problema. Porque el día 11 probablemente fue un evento coyuntural, o un elemento desencadenante de una serie de eventos que venían ocurriendo desde mucho antes.

Creo que sobradas han sido las declaraciones hechas ante esta Comisión, donde se manifiesta que había gente conspirando desde hace más de seis meses y que el gobierno lo sabía. Creo que sobre eso no tenemos ninguna duda. Había gente conspirando y el gobierno lo sabía.

¿Qué pasó el día 11? En mi opinión, el día 11 convergen cuatro fuerzas distintas que hacen muy complejo estudiar el problema, porque el reduccionismo nos quiere llevar a que todos los actores estaban haciendo lo mismo, que todos los actores tenían los mismos intereses y que todos los actores tenían las mismas motivaciones. Y creo que allí incurriríamos en un error al tratar de verlo de manera tan sencilla.

Así que, repito, en mi opinión yo creo que lo conveniente es estudiar la situación desde cuatro ángulos distintos. El ángulo de aquella combinación de actores, que según ha dado testimonio la fuente gubernamental, estaban conspirando o estaban tratando de llevar adelante acciones para derrocar un gobierno por algún método. Ese es un tema que hay que estudiar, y son unos actores que deben identificarse para tratar de determinar cuáles eran sus intereses, cuáles eran sus motivaciones y cuáles fueron sus actuaciones.

Igualmente hay un segundo actor: el gobierno, que a sabiendas de que se iba a producir un golpe supuestamente estaba haciendo algo. ¿Qué estaba haciendo el gobierno durante más de seis meses, a sabiendas de que se quería dar un golpe? ¿Estaba esperando de manera pasiva a que se produjera el golpe, y ya veremos? ¿O como hemos escuchado por ahí, estaba a la saga, preparando un contragolpe? ¿Y qué es un contragolpe? ¿Cuáles eran las acciones destinadas al contragolpe?

Yéndonos al trabajo que he consignado, allí lo que se dice es que cuando existen amenazas contra el status quo, la responsabilidad del subsistema de gobierno es llevar adelante todas las medidas necesarias para neutralizar esas amenazas, para reducir esas amenazas. Y en democracia el mejor camino es el diálogo, el diálogo constructivo donde el gobierno convoca a quienes tiene identificados como posibles conspiradores, o como posibles golpistas, para que a través del diálogo se pueda establecer cuáles son las motivaciones que lo han llevado a esa conducta y tomar las decisiones necesarias a fin de que ese comportamiento que podría llevar a futuro a un golpe, desaparezca.

Sin embargo, mientras estuve trabajando en el gobierno, y esa fue una de las razones por las cuales solicité mi pase a retiro de las Fuerzas Armadas Nacionales, lo que se estaba diseñando era el contragolpe. No se estaban llevando a cabo diálogos constructivos para minimizar las causas, sino que se estaba diseñando el contragolpe a fin de determinar cuáles son las cabezas pensantes de este movimiento y poder extirparlas quirúrgicamente en el momento que afloren. Esa es mi opinión.

Con respecto a esos dos actores más que convergen ese día. Entonces tenemos, el gobierno preparando el contragolpe, un grupo de personas supuestamente preparando un golpe.

Tenemos un tercer actor, que es una porción de la sociedad civil, y digo una porción para no ponerle tamaño porque creo que no es lo importante, una porción de la sociedad civil que sí podemos decir que durante el último año es de naturaleza creciente en magnitud, que tenía una motivación: pedirle al gobierno una rectificación de conducta, pedirle al gobierno un cambio de dirección, y que lamentablemente eso no se producía, y que lamentablemente hubo un elemento desencadenante asociado con PDVSA y a un programa transmitido el día domingo 7 de abril, donde muchas de esas personas, entre las cuales me incluyo, que hasta ese día decíamos: "necesitamos una rectificación", comenzamos a pensar que dada la forma y el contenido de ese programa nos indicó que ya la rectificación no era posible, porque lo que ocurrió ese domingo 7 nos decía: pareciera que la única salida es pedir la renuncia del Presidente de la República.

En lo particular, Guaicaipuro Lameda, a partir del lunes 8 de abril cambió su forma de pensar y dijo: ya no pido más rectificación, creo que es necesario pedir la renuncia del Presidente. Y allí está un grupo que puede ser minoritario, pero que en el ejercicio de la democracia dentro del Estado de Derecho merece respeto, aun cuando sea minoría. La estabilidad de la democracia se fundamenta en el respeto a la minoría, porque cuando a la minoría se le acorrala, se le ofende, se le insulta y no se le toma en cuenta, esa minoría probablemente busque un camino para reaccionar. Eso no lo digo yo, eso lo dicen quienes han teorizado sobre la política.

Si a la minoría no se le deja una salida para que se exprese con dignidad y se le escucha en su planteamiento, esa minoría buscará algún camino. En algunas sociedades eso se convierte en terrorismo. Por eso, en la democracia una de las cosas importantes, insisto, es el respeto a las minorías. Y en este país democrático, eso que llaman diputados que resultan electos por cociente electoral, son una manifestación del respeto a las minorías, que tienen el respeto a expresarse libremente y por canales que sean válidamente reconocidos y que tengan interlocutores a quienes se les respete adecuadamente.

Así que tenemos ese tercer actor que es una porción de la sociedad civil que podemos llamar minoría pero que se sentía irrespetada, gente con la cual me tocó compartir durante los días que transcurren entre más o menos el 20 de febrero y el 10 de abril, gentes que conversando con ellas me decían: General ¿qué hacemos? Hacemos una marcha y nos irrespetan, hacemos un cacerolazo y nos ignoran. Nosotros sonamos nuestras cacerolas y nos dicen que eso ique es un CD. Nosotros hacemos una marcha y entonces nos hacen una contramarcha, y la discusión se centra en quién tuvo la marcha más grande. Nosotros lo que queremos es que escuchen las demandas que estamos haciendo. No nos interesa cuál marcha es más grande. Somos un grupo de venezolanos que merece respeto y que quiere ser escuchado. Yo me sumo a esa minoría, si se puede llamar así, de esta sociedad venezolana, allí me sumé, allí estoy, allí me mantengo, y estando allí no doy un paso atrás.

Hay un cuarto grupo que participa ese día, que es muy importante: La Fuerza Armada. Lamentablemente una Fuerza Armada absolutamente confundida ese día. Confundida porque si de contragolpe se trata, los conceptos de golpe que se manejan tienen dos fundamentos básicos: el primero, ni marcha, ni cacerolazo, ni manifestación pacífica tumba gobierno. Para tumbar un gobierno se requieren, como decía, dos cosas: uno, la Fuerza Armada y una porción importante, o de algunos componentes de la Fuerza Armada Nacional, o la paralización de actividades vitales en la república de manera consistente, de manera permanente.

Así pues que el primer elemento, siendo la Fuerza Armada, podría neutralizarse si se logra que la Fuerza Armada no salga del Fuerte Tiuna para dirigirse al centro simbólico del poder, que es Miraflores.

Quienes preparaban el contragolpe conocen muy bien de lo que significa llevar la Fuerza Armada a Miraflores, por tanto debemos hacer todo lo posible para inhibirlo. Repito, la Fuerza Armada no debe ir a Miraflores. Si no va a Miraflores no hay fuerza posible para derrocar al gobierno.

Sin embargo, el día 11 genera un efecto importante, y es que la naturaleza de los eventos parecen requerir la presencia de la Fuerza Armada para evitar una confrontación entre dos sectores de la sociedad civil, quienes se habían colocado frente a Miraflores y quienes venían marchando desde Chuao, y necesitábamos colocar allí alguna barrera que impidiera la confrontación entre esos dos sectores de la sociedad civil. Y si la orden es: ¡muévanse a Miraflores! la confusión en Fuerte Tiuna es tremenda.

Si a un Mayor, Segundo Comandante de un Batallón le dicen: Váyase con su unidad a Miraflores, y estábamos en ambiente de golpe, y me imagino que en las Fuerzas Armadas se hablaba en términos de instrucciones que se deben llevar a cabo si se produce un golpe. Y permítanme hacer una digresión, quien les habla fue comandante de un batallón entre el 12 de febrero de 1992 y julio de 1993, época en que se hablaba de golpes todas las semanas, donde se hacían planes para contrarrestar cualquier efecto de golpe, cuando se decía por ejemplo, en un plan: situación, elementos desafectos de la Brigada Blindada se aproximarán hacia Caracas con el objeto de tomar el gobierno. Esas eran las cosas que se manejaban en 1992, y en esa época pues yo era comandante de Batallón, por eso conozco de las órdenes y las acciones que se llevan a cabo dentro de las Fuerzas Armadas cuando la circunstancia es de pregolpe, conocido por el gobierno. Y después tuvimos el golpe del 27 de noviembre, sobre el cual hoy existen muchas dudas, si el golpe fue auspiciado por el gobierno para determinar cuáles fueron las personas que estaban allí involucradas y poder exterminar esa causa.

Así que, esa Fuerza Armada confundida allá en Fuerte Tiuna, cuando le dicen a los oficiales: Ustedes tienen que ir a Miraflores, la pregunta que se hacen es ¿a qué voy a Miraflores? Si el planteamiento que hace la Constitución de la República de Venezuela es, que a ninguna manifestación pacífica se le combate con armas o sustancias químicas, si mal no recuerdo artículo 68 de la Constitución, segundo párrafo, cualquier oficial de la Fuerza Armada se hacía una pregunta, a las 11 de la mañana: Yo no estoy metido en un golpe, soy segundo comandante de un batallón y me están diciendo: muévase a Miraflores! Yo me preguntaría ¿a qué? ¿Y quién está dando la orden? ¿Para qué voy a ir allá?

Por otro lado, quienes estaban propiciando el golpe probablemente tendrían algunas intenciones, algunos dicen que querían que se movieran las unidades a Miraflores. Pero en algunas conversaciones que he escuchado decían: lo peor que puede hacer la Fuerza Armada, si le quiere dar un golpe al gobierno, es moverse a Miraflores, porque el plan de contragolpe incluye la movilización de la sociedad civil frente a Miraflores para colocarla como escudo frente a la Fuerza Armada, lo cual inhabilita a cualquier militar que con tanques, o con vehículos motorizados se aproxime a Miraflores, porque, dígame usted cómo quien pretende entrar a Miraflores le va a disparar a la sociedad civil que está en situación de desventaja de fuerza bélica, frente a Miraflores?

Así que, colocar gente frente a Miraflores en el momento en que se percibe la posible ocurrencia de un golpe de Fuerza es la inhabilitación de la fuerza militar para llegar a su objetivo. Y por eso vimos en varios momentos, al menos podríamos citar dos, que esto se practicó mediante el llamado de los más altos funcionarios del gobierno, llamado que se hizo público a través de los medios de comunicación.

Entonces, creo yo, insisto, es mi opinión, la cual estoy seguro tiene el sesgo de mi formación y el sesgo de mis convicciones, pero como todas, es una opinión que espero pueda ayudar de alguna manera en la interpretación de los hechos y que pueda ayudar de alguna manera en la construcción de lo que pueda parecerse más a la verdad de lo que allí ocurrió.

Así que para cerrar con mi opinión, quiero hacer énfasis en que debemos distinguir la motivación y las causas que impulsaron a por lo menos cuatro actores que participaron simultáneamente, que son: el gobierno en la preparación de un contragolpe; un grupo de personas que se ha dicho sobradamente estaba preparando un golpe desde hacía más de seis meses; una porción de la sociedad civil que exigía respeto a su condición de minoría y como tal exigían una rectificación de gobierno que luego se transformó en una solicitud amparada en la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en términos de que el Presidente de nuestro país renunciara al ejercicio de su cargo; y cuarto una Fuerza Armada que llegó a una situación de confusión que la inhabilitaba para actuar y que la condujo a tomar decisiones que hoy día la misma gente no se explica y que la misma gente dice: pero bueno ¿y qué hicieron los generales? Bueno, lo que hicieron los generales se corresponde con lo que era la generación de circunstancias para la confusión que cundió en la Fuerza Armada Nacional.

Dicho esto, reitero a todos ustedes señores diputados, señor Presidente de la Comisión, mi agradecimiento por haberme permitido venir a este recinto, frente a la majestad que reviste la Asamblea Nacional como la representación más plural de la sociedad, a contribuir con mi modesta opinión, si ella en algo puede ayudar. Muchas gracias.

Presidente: Diputado César Pérez Vivas.

Diputado César Pérez Vivas: Señor Presidente, quisiera, antes de que se inicie la fase de preguntas de los señores diputados, plantear un punto de orden en razón de que estamos ajustando las invitaciones, se han reducido un poco la lista de personas a ser invitadas a comparecer, y quisiera que no se nos fuera ya la dinámica del día de hoy sin que pudiera proponer a la Comisión el estudio de una materia que a mi modo de ver reviste especial importancia por su gravedad para la soberanía nacional y en consecuencia podamos agregar dos personas, dos altos funcionarios a la lista que está pendiente. Y en este sentido quisiera solicitar que se invite a comparecer en la lista que se está organizando y se están enviando las comunicaciones en la tarde de hoy, al ciudadano Vicepresidente y anterior Ministro de la Defensa, al doctor José Vicente Rangel, y al señor Canciller de la República, por cuanto los medios de comunicación venezolanos en el día de hoy han registrado una información proveniente del Departamento de Estado, del doctor Otto Reich, según la cual en el país estamos con tres aviones cubanos el día 12 de abril. En ese sentido, señor Presidente, propongo que esta materia se incorpore a la agenda que está pendiente y que sea resuelto antes de proceder al interrogatorio al General Guaicaipuro Lameda. Es todo, señor Presidente, colegas diputados.

Presidente: Le informo al diputado César Pérez Vivas, que si tiene alguna proposición pásela por escrito, que Secretaría se la recibirá.

Informo a los colegas parlamentarios, recuerdo, artículo 3. Cumplimiento de solemnidades. "El Presidente y Vicepresidente de la Comisión Especial, tomará las medidas necesarias para evitar las interferencias o interrupciones durante el desarrollo de las reuniones, así como cualquier conducta que atente contra el espíritu de cordialidad y respeto que debe prevalecer.

Parlamentarios en el derecho de palabra informo, Diputado Carlos Casanova, Diputado Juan José Caldera, Diputado César López, Diputado Raúl Esté, Diputado Gerardo Blyde, Diputada Iris Varela, y el Diputado Pedro Pablo Alcántara. Tiene la palabra el Diputado Carlos Casanova.

Diputado Carlos Casanova: Gracias ciudadano Presidente, colegas parlamentarios. Buenas tardes señor General Guaicaipuro Lameda.

Mi primera pregunta, porque esta Comisión General no solamente estudia los hechos sucedidos el 11, el 12 , el 13 y el 14, sino también el origen de estos hechos, de ahí el por qué mi primera pregunta, para empezar a hacer mis apuntes con sus respuestas tiene que ver con eso.

Mi primera pregunta es así: ¿Cree usted que el origen del descontento social que conduce a las innumerables marchas y concentraciones está en la crisis de gobernabilidad y legitimidad del Gobierno y de los poderes públicos?.

En mi segunda pregunta voy a apelar a su experiencia de General del Ejército para formulársela en los siguientes términos: ¿Cree usted que las relaciones de altos personeros del Gobierno con la guerrilla colombiana, así como las profundas relaciones con Cuba son causa de la fractura y división militar?.

La tercera pregunta vista la nueva tesis que usted nos estaba presentando hoy, muy interesante por cierto, del contra-golpe, es necesario aclarar, establecer algunas responsabilidades General y quiero que usted nos ayude en esto. El Gobierno ha señalado que los muertos de los días 12 y 13 ha sido el Gobierno de transición, el gobierno de Pedro Carmona, ellos han señalado enfáticamente que los muertos de esos dos días le corresponden a Pedro Carmona y a quienes hacían las veces de gobierno, porque ellos no estaban en el Gobierno. Mi pregunta entonces:¿Quién cree usted que es el responsable entonces de los muertos del 11 de abril, si el gobierno dice que los del 12 y el 13 son los de Gobierno de transición, quien es entonces el responsable de los muertos del 11?.

Una pregunta que viene en este mismo sentido. Visto el estado de confusión entonces en el que al parecer, -porque aquí los ministros han dicho que efectivamente los operativos de inteligencia fracasaron que los conspiradores estaban metidos dentro del Gobierno, que por eso las órdenes se impartían y no se ejecutaban, es bien interesante entonces preguntar lo siguiente ¿qué organismos del Estado son los responsables de evitar los lamentables hechos del 11 de abril?, porque obviamente después que la marcha se conduce hacia Miraflores, alguien tiene la responsabilidad de evitar los lamentables hechos que se sucedieron. Gracias ciudadano General, gracias colegas parlamentarios.

Presidente: Tiene la palabra el ciudadano Guaicaipuro Lameda

Ciudadano Guaicaipuro Lameda: Bien, descontento social. Desde el punto de vista teórico, si nosotros nos remontamos a febrero del 99, inicio del Gobierno, hablar de descontento social era un absurdo, lo que había era fe y esperanza, una sociedad venezolana que para finales del 98 tenía deseos, fervientes deseos de que en este país se produjera una transformación importante en la forma de conducir a la sociedad para construir un Estado de progreso y bienestar que beneficiara a la mayoría de los venezolanos, eso era lo que teníamos en 1999, febrero del 99, y creo que eso llegó a una mayoría de los venezolanos a depositar esa fe y esa confianza mediante el sufragio en una persona: Hugo Chávez Frías. Lo que si creo que ocurrió es que en el momento en que los ciudadanos votaron, todos coincidían en una idea: necesitamos un cambio, necesitamos una transformación, lo que probablemente no nos preguntamos en ese momento es ¿cuál es el cambio, en qué dirección y cómo se va a instrumentar?. Y en la medida en que eso va ocurriendo, comienza a aparecer lo que yo he llamado la "decepción y la frustración", porque la gente comienza a decir, yo no voté para eso, y esa mayoría va creciendo.

Este planteamiento lo hice por escrito en un documento de 8 páginas que consigné al General Rafael Martínez Morales el 27 de diciembre del año pasado, me pedían una opinión sobre lo que estaba ocurriendo, qué cosas podría hacer la oposición para desestabilizar el Gobierno, qué cosas podría hacer el Gobierno para neutralizar la oposición?. En un documento pues yo le hacía este planteamiento, creo que tenemos que ver el fondo del problema y allí escribía, en ese documento, que lamentablemente las palabras "revolución, proyecto, proceso" son muletillas que se utilizan con el fin de tener un piso común, pero que incluso no hay coincidencia de contexto, no hay coincidencia de fondo entre quienes utilizan esas palabras, pero son las que sirven para dar una apariencia de consenso frente a la transformación que se le vende al país y que sirve para hacer discursos homogéneos, pero que lamentablemente no nos permiten construir una sociedad con la transparencia conceptual que nos exige el Artículo 141 de la Constitución, porque repito, en mi opinión, las palabras "revolución, proyecto o proceso" no significan lo mismo para los actores que conducen la transformación.

Entonces, si dentro de los mismos elementos que conducen la transformación esas palabras no significan lo mismo, mucho menos para quienes se ubican en la oposición, que cuando escuchan a los interlocutores que llevan adelante el proceso, pues se ven confundidos, porque frente a un actor, "revolución" significa una cosa, diferente a otro actor, "revolución" significa otra cosa, y lamentablemente esa es la circunstancia que hemos venido viviendo y que termina degenerando en descontento social iniciado por frustración frente a un proceso de transformación que no coincide con lo que el venezolano pensaba en febrero de 1999 y que comienza a exacerbarse ese descontento social en el momento en que se hace un llamado a la radicalización del proceso, donde yo mismo que trabajaba para el Gobierno no sabía qué significaba, y cuando le preguntaba a diferentes actores que están dentro del Gobierno, para cada actor, la radicalización del proceso significa una cosa distinta, por supuesto que esos niveles de inconsistencia generan descontento en la gente por frustración ante la incertidumbre.

Segunda pregunta: ¿Conoce usted relaciones del alto Gobierno con la guerrilla colombiana así como las profundas relaciones con Cuba?.

Permítame hacer dos acotaciones: relaciones con Cuba. Yo no creo que sea ilícito, negativo o perverso que Venezuela tenga relaciones con un país o con otro, particularmente Cuba y creo que tampoco sea negativo o perverso que exista alguna relación entre el Gobierno y la guerrilla. El problema es el contexto de la relación y la transparencia con la cual se lleva adelante esa relación. Países de Europa mantienen extraordinarias relaciones económicas y comerciales con Cuba, hoy día, y el desarrollo del turismo en Cuba se debe fundamentalmente a que capitales procedentes de Europa se han radicado allí para desarrollar negocios lucrativos para las empresas trasnacionales que allí operan y dejar beneficios sustantivos para una sociedad que aspira progreso. Y yo creo que eso no es ilícito, y si nosotros copiásemos ese modelo, yo creo que lo bendeciríamos.

El problema que hay allí es que los venezolanos no conocemos a fondo o con claridad o con transparencia cuál es la naturaleza de esa relación, y los indicios que recibimos a través de los medios de comunicación y no a través de los agentes formales del Gobierno nos siembran innumerables dudas, y por eso invoco nuevamente el Artículo 141 de la Constitución "transparencia en la gestión pública". Entonces para mi el problema no está en que haya una relación, el problema está en cuál es el contexto de la relación entre el país o el gobierno y el otro agente, y cuál es el objetivo que persigue el país, manteniendo esa relación, porque si perseguimos un objetivo que satisface a los intereses de Venezuela y eso es perfectamente compartido por la sociedad, cuál es el problema?, es una relación que responde a los intereses del país, es compartido por los miembros de la sociedad y la relación se lleva adelante con absoluta transparencia.

Lo que no se es, si con respecto a los temas que están implícitos en la pregunta, tenemos la respuesta a la naturaleza de relación que debemos mantener tanto con Cuba como con la guerrilla colombiana, es allí donde tenemos que centrar la atención y es allí donde tenemos que exigirle al Gobierno aún siendo minoría, que nos de una explicación clara del objeto, propósito y razón de esas relaciones, y lamentablemente a veces, centramos la atención y distraemos el tiempo en la forma, en preguntar si el video es lícito si no es lícito, en preguntar si este señor que ocupaba tal cargo fue allá o no fue allá y dejamos de lado lo verdaderamente importante, cual es el objeto el propósito y la relación, y cómo se vincula esa relación con los máximos intereses de nuestro país, es allí donde verdaderamente es importante, y es allí donde nosotros estamos en la obligación de preguntar al Gobierno, si la respuesta que se da es lo que se corresponde con los intereses del país.

¿Quién es el responsable de los muertos del día 11 de abril?. Bueno a mi no me corresponde establecer responsabilidades sobre muertos. Días antes leí un artículo en la prensa, un artículo de opinión, el autor decía "estamos frente a una situación donde ambos actores requieren un muerto, el gran problema es que cada quien quiere el muerto de su lado", eso lo escribió alguien en la prensa.

Yo no sé quién es responsable de los muertos, pero podrían haber responsabilidades compartidas en dos actores, porque si lo que teoriza este autor en su artículo de opinión es cierto, tanto quien preparaba el contragolpe tenía interés en que hubieran muertos de su lado como que preparaba el golpe tenía interés de que hubieran muertos del suyo, entonces allí hay dos actores que tenían intereses comunes: que hubieran muertos, porque la presencia de un muerto de su lado le permite invocar el abuso del otro y la historia la escribe el que gana la historia, o sea, el que gana, escribe la historia y entonces ya veremos a quien le adjudicamos la responsabilidad de los muertos.

La historia militar está llena de provocaciones hechas desde un bando para acusar al otro, técnica utilizada a lo largo de la historia, déjame ver como hago yo que se vea que el otro me ha provocado para yo actuar, esa es una técnica utilizada a lo largo de la historia, las fuerzas militares la han utilizado, muchos capítulos podemos leer de operaciones que se han conducido de esa manera.

Este país tiene capítulos escritos en su historia, que estoy seguro, quienes están aquí conocen y que por lo delicado de su naturaleza creo que se discuten en razón de los máximos intereses del país, y este no es el escenario, y es historia, quienes conocen como ocurrieron algunos capítulos de este país pueden narrarlo, yo solo pues tengo las referencias de algunos eventos, pero eso no solo ha ocurrido aquí en Venezuela, ha ocurrido en muchos países, así que yo creo que una de las hipótesis que no se pueden descartar y que hay que revisar porque la confusión es grande, al menos lo que hemos visto, hasta ahora, es una confusión tremenda, pero esa hipótesis de que dos de los actores necesitaban muertos y cada quien los necesitaba de su lado, es una hipótesis, una hipótesis que como tal merece atención y que como tal merece revisión para ver dónde está la responsabilidad de los muertos y a lo mejor nos encontramos que ambos actores podrían tener responsabilidad y ser compartida. No me corresponde a mi juzgarlos, solamente pues dejo allí esa hipótesis. Creo que con esto respondo las tres preguntas del Diputado Carlos Casanova a quien se las agradezco.

Presidente: Tiene la palabra el Diputado Juan José Caldera.

Diputado Juan José Caldera: Señor General, como hombre de formación castrense que alcanzó el generalato, es un hombre conocedor de los reglamentos militares y del comportamiento de la Fuerza Armada frente a situaciones de orden público, debe conocer el Plan Avila, etc., pero su formación lo hace un testigo de excepción en mi opinión, en torno a los graves acontecimientos que se produjeron en las inmediaciones del Palacio de Miraflores el día jueves 11 de abril, incluso se ha hecho referencia a su propio comportamiento por parte de algunos funcionarios altos del Gobierno. Como lo considero testigo de excepción quisiera hacerle las siguientes preguntas.

En primer lugar, en su opinión ¿cuál fue el comportamiento de la Guardia Nacional y de la Guardia de Honor frente a la marcha pacífica de la oposición?

En segundo lugar. ¿Cuál cree usted que fue el comportamiento de esos mismos contingentes uniformados frente a los civiles que disparaban desde Puente Llaguno a escasos metros del Palacio de Miraflores?.

Y en tercer lugar señor General. ¿Usted cree que pudo evitarse la masacre?. En su opinión ¿cómo?. Es todo señor Presidente.

General Guaicaipuro Lameda: Diputado Juan José Caldera agradecido por sus preguntas y yo me voy a permitir, ya que usted ha citado allí que soy un testigo de excepción, yo también he escuchado las personas que han presentado testimonios aquí ante la Asamblea, y creo que vale la pena que yo haga algunos comentarios asociados, incluso con mi participación. Creo que es importante, al menos en lo personal, permítanme llegar hasta ese punto.

El comportamiento de la Guardia Nacional. Mire, no me gusta emitir opiniones sobre eventos en los cuales no tengo fundamento y cuando emito alguna opinión en términos generales como la que hice en mi introducción, trato de buscar algún fundamento teórico que permita ayudar a fundamentarla. Así que lo que voy a mencionar aquí no quiere comprometer a la Guardia Nacional como institución, porque yo puedo emitir la opinión por lo que vi, por lo que viví y por lo que sufrí el día 11, frente a una formación de guardias nacionales que estaba en la intersección de la Avenida Urdaneta con la Avenida Sucre a unos, digamos 100 metros de las escaleras del Calvario, donde yo me encontraba.

Si usted me pide la opinión de esa formación de la Guardia Nacional que estaba allí le confieso que nunca me imaginé que vería una actuación tan vil, como la que me tocó presenciar ese día, porque este señor que está sentado aquí, fue la primera víctima de la Guardia Nacional, hay gente que ha dicho que el General Lameda iba a la cabeza de la marcha incitando a la violencia en Miraflores, nada más falso que eso y permítanme la oportunidad para manifestar abiertamente, la motivación que me llevó a llegar a la cabeza de la marcha. El origen de mi presencia de la cabeza de la marcha tiene que ver con una conversación telefónica que sostuve el día 7 de febrero con el General en Jefe Lucas Rincón Romero, en horas de la noche, aproximadamente 8 y media de la noche, por qué el día viernes 7 de febrero?.

Ese día yo percibí, mientras estaba sentado en mi oficina en PDVSA que se estaba realizando el primer ensayo del contragolpe, día 7 de febrero, 7 de febrero, podría ser el 6, es el día en que el Coronel Soto da unas declaraciones, se reúne una multitud en la Plaza Altamira y se desplaza hacia la Casona, en ese momento se produce un llamado inmediato a que la gente se vaya a Miraflores, pregunto yo ¿con qué objeto?, ¿cuál era el propósito?, ¿para qué se convoca a la sociedad civil frente a Miraflores cuando hay una manifestación frente a la Casona?, llamé al General Rincón Romero y le dije: mi General usted bien sabe que ya yo estoy fuera del Gobierno y fuera de las Fuerzas Armadas, eso se debe a que el día 31 de enero ya yo había pedido mi pase a la situación de retiro y había renunciado a toda posibilidad de participación en el gobierno, a pesar de un ofrecimiento a que fuera a ocupar un cargo en el exterior.

Así pues que le digo al General Rincón, usted sabe que estoy fuera, solo espero que se materialice la decisión formal para retirarme, pero hoy creo yo que ha llegado el día mi General en que usted está en la obligación, escúchenme bien el término, de emplazar al Presidente de la República para que evitemos lo que no quisiéramos ver, y es que a alguien en este país se le ocurra movilizar a algunos de estos dos grupos y generar una confrontación porque vamos a tener muertos y eso va a ser inevitable, usted es el oficial de más alta graduación de las Fuerzas Armadas y creo que usted tiene la responsabilidad de emplazar al Presidente frente a estos hechos, porque la ubicación de esta gente frente a Miraflores, con propósitos conocidos, la está propiciando el Gobierno y si a alguien se le ocurre hacer la movilización no le quepa la menor duda mi General que hay muertos. Yo no quiero estar ni en el Gobierno ni en las Fuerzas Armadas ese día, le agradezco dos cosas: que emplace al Presidente y dígale que firme y pase a retiro inmediatamente.

Así que cuando estaba en la marcha yo me entero que la marcha podría llegar hasta Miraflores, estando en Chuao y tomé una decisión, necesariamente yo debo llegar a la cabeza para tratar de evitar una confrontación, trataré de hacer todo lo posible por mantener a la gente fuera de una confrontación, ya veremos qué me presenta las circunstancias y ya veremos si puedo hacer algol. Quienes estuvieron en la marcha creo que me vieron ir a paso más que acelerado, caso al trote desde Chuao hasta Miraflores, abriéndome paso entre la gente para llegar allí. Cuando llegué allí me conseguí con un cordón de la Policía Metropolitana donde se debatían a empujones quienes marchaban y la Policía, y la Policía le decía a los ciudadanos, "si ustedes pasan están locos porque los van a matar" eso era lo que decían los policías. Yo pedí una bandera y me acerqué hasta la Policía y les dije, yo creo que puedo hacer algo, vamos a tratar de separarnos Policía y manifestantes, vamos a dejar los empujones y permítanme a mi, ir solo con una bandera a hablar con la Guardia Nacional que está allá enfrente y cuando pedí ir solo con una bandera, es porque para quienes somos militares, marchar solo con una bandera tiene un significado, todas las unidades militares tienes estandarte y la historia de las Fuerzas Armadas dice para qué las Fuerzas Armadas tienen estandarte, yo pedí una bandera y dije, permítanme ir solo.

El comisario que estaba allí me dijo usted esta loco, usted no puede pasar, le dije mire comisario es preferible morir en el intento, pero debemos hacer el intento.

Me pidieron que me pusiera un chaleco antibalas y le dije no, voy bajo el amparo de la bandera de Venezuela, y soy un general del ejército y creo que la bandera y un general merecen el respeto de la Guardia Nacional, yo hablo con ellos.

Mi decepción fue tremenda, cuando estaba a menos de veinte metros de la formación de la Guardia Nacional, el Guardia Nacional que se encontraba en el extremo oeste de la formación que tenía el fusil apuntando hacia el suelo me lanzó una botella, y tres Guardias Nacionales cada uno de ellos me lanzó una granada de gas lacrimógeno.

Los testigos sobran, no me quedo mas que retroceder con mi bandera para no tragar gas, y les confieso que la multitud se enardeció y sobrepaso el cordón de la policía.

Varias personas que estábamos allí logramos convencer a la gente de que no se trataba de un acto violencia, y que nosotros podíamos dar el ejemplo, y que si nosotros no ejercíamos violencia no habría violencia, porque para una pelea se necesitan dos dispuestos.

Logré pedirle a la gente, por favor denme una segunda oportunidad y en esa segunda oportunidad fui acompañado de otra persona que llegó al sitio, el Almirante Molina Tamayo, llegó allí lo vi y le dije: Molina tú me podrías ayudar, vamos a hablar con la Guardia Nacional, vamos con una bandera de Venezuela y con una bandera blanca para hablar con ellos, y pedirles que nos escolten hasta el Palacio de Miraflores para hablar con el Presidente y decirle al Presidente, tal como lo pueden ver ustedes que lo mencioné a través de un canal de televisión horas después "Presidente lo único que estamos pidiendo es que usted le de una respuesta a esta multitud que sólo tenía como aspiración, pararse frente al balcón del pueblo y que usted saliera a darnos una respuesta, pero ya que no podemos llegar allá vaya usted a la avenida Bolívar y de el discurso que corresponde frente a esta multitud que está haciendo una solicitud pacífica, dentro de un estado democrático y amparada en la Constitución Nacional".

La respuesta que recibimos antes de llegar a la Guardia Nacional fue contundente, ya no nos lanzaron piedras, perdón botellas y gases, sino que adicionalmente nos lanzaron piedras que salían de atrás de la formación de la Guardia Nacional, alguien nos lanzaba piedras, las piedras salían de la parte de atrás de la Guardia Nacional .

Si había una situación de desorden público en ese momento, no hablemos de una hora después, en ese momento. ¿Cuál es el deber de la Guardia Nacional?.

Escuchamos una expresión entre la multitud, vinieron reforzamos ahora trajeron la bandera de los adecos en referencia a la bandera blanca, eso fue lo que escuchamos.

En ese momento había una situación de desorden público donde alguien estaba lanzándole piedras a un general y a un almirante que sólo portaban dos banderas, y ¿qué hizo la Guardia Nacional?, nos lanzó mas gas, al general y al almirante, pero ahora con la fuerza de las armas para que llegaran mas lejos y también sobre la multitud.

Todavía frente a ese evento logramos convencer a quienes allí estaban para que se sentaran en la calle, levantaran las banderas y cantaran el himno nacional, y así lo hicieron, qué hizo la Guardia Nacional, disparó más gas, lo cual hizo levantar a la gente y correr hacia la plaza O’Leary.

Cuando la gente corría hacia la plaza O’Leary, en pocas palabras, términos, se batían en retirada, la Guardia Nacional comenzó avanzar bajando la avenida Sucre y tras de ellos avanzaba una multitud de personas que lanzaban piedras.

Recuerdo que una persona me dijo a mí, usted no parece un general, los generales combaten, usted no carga con que echar plomo, y yo le digo mire el plomo que yo hecho sale de mi lengua y yo discuto con ideas, por eso pase a retiro.

Me dijo, bueno general permítanos aunque sea recoger las granadas y devolverlas, no me quedo mas que responderle eso lo dejo a su riesgo, porque es temerario, yo no me atrevería a recoger una granada que esta expidiendo gas porque voy a tragar mucho, así es que si usted se atreve hacer eso lo dejo a su propio riesgo.

Hasta ese momento y les habla con propiedad, la primera víctima de agresión, no habían muertos, no habían heridos, lo único que había era gente tragando gas, gente recibiendo piedras y una Guardia Nacional colocada delante de quienes tiraban piedras castigando a quienes las recibían.

Mientras la Guardia Nacional comenzó a avanzar hacia la plaza O’Leary comenzaron a sonar disparos al aire, y digo al aire porque al menos quienes estabamos allí escuchábamos los disparos pero no veíamos caídos, y no había ningún medio de comunicación que pudiera transmitir en vivo lo que estaba ocurriendo.

En ese momento yo tome una segundo decisión, me voy a un canal de televisión a tratar de manifestar públicamente lo que estoy viendo que ocurre, logré que la Policía Metropolitana me facilitara irme en una motocicleta con un policía y el canal que logré contactar para que me diera el espacio fue Venevisión, y me dirigí hasta allá.

Comencé a narrar lo que ocurría y lamentablemente no pude terminarlo porque mientras yo hablaba comenzó una cadena presidencial, y el resto de la historia es pública. Mientras estábamos viendo la cadena estábamos recibiendo, bueno en el canal estaban recibiendo información yo estaba allí, de que habían empezado a caer muertos y eso ya era conocido.

Es posible que alguien haya convocado la marcha a Miraflores, pero también es conocido quien convocó a las personas que se apostaron en Miraflores, y si esa confrontación se podía evitar yo creo que la mejor forma de evitarla era permitiendo que una manifestación pacífica llegara hasta la Avenida Urdaneta y se colocará frente al balcón del pueblo para esperar una respuesta de su Presidente, y no hubiera pasado nada porque los francotiradores no tenían justificación para disparar.

Imagínense ustedes llegando a la avenida Urdaneta por la ruta que llevaba, colocándose frente Miraflores sin la existencia de ese grupo de personas que fue convocada por funcionarios del gobierno, y simplemente haciendo el pedido que hicieron desde Chuao, díganme ustedes que francotirador tiene justificación para causar un muerto, de uno o de otro bando.

Por eso es que en mí introducción yo decía que en democracia el respeto a las minorías es importante, porque si esa minoría insignificante que marcho ese día podía pararse frente al balcón del pueblo y decirle al Presidente renuncié, y el Presidente le dice, caramba ustedes son una minoría insignificante que no merece atención por tanto no renuncio, no hubiera pasado nada, sencillamente se van con su planteamiento minoritario a otro lado.

Lamentablemente hubo alguien que preparó el escenario para que eso no ocurriera, esa es mi opinión. ‘¿Se podían evitar las muertes?. Yo creo que permitiendo una manifestación que de manera pacífica pudiera llegar hasta la avenida Urdaneta, pararse allí dentro y decirle al presidente lo mismo que se dijo en Chuao, sencillamente impedía cualquier muerto, y por supuesto, esa minoría que manifestaba merecía una respuesta para que se disolviera y se fuera a sus casas tranquilamente, después de recibir la respuesta al planteamiento que hacía.

Creo que la número dos. Bueno mira sí. ¿Cuál cree usted que fue el comportamiento de esos mismos contingentes uniformados frente a los civiles que disparaban desde el Puente Llaguno a escasos metros del Palacio de Miraflores?.

Bien si había Guardia Nacional allí y había gente disparando y ellos lo sabía, creo que el comportamiento es aún mas vil que él que vi, no puedo dar fe estoy especulando, por favor. Si allí había Guardia Nacional y había gente disparando y es deber de la Guardia Nacional restituir el orden alterado, es vil, es vil si era guardia, bueno si era Guardia Nacional disculpe diputado.

¿Si era Guardia de Honor o Guardia Nacional ambos componentes de la Fuerza Armada?.

Sería muy vil frente a esos eventos cuando aún no habían caído muertos, los que yo vi, los que yo sufrí. Cuando a mí me dispararon gas lacrimógeno en la Avenida Sucre hubo una violación flagrante del artículo 68 de la Constitución Nacional, que venga alguien y me diga lo contrario.

Pero en ese momento se violó la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, se utilizaron tóxicos, químicos contra una persona que manifestaba solo con una bandera y que quería hablar con la Guardia Nacional haciendo honor a la bandera y a la majestad de general, para pedir que se le escoltara hasta el Despacho del Presidente, conversar con él y decirle Presidente usted tiene en este momento una responsabilidad que es atender esa multitud.

Y permítanme agregar algo. Multitud bien conocida en dimensión porque ese día se prohibió la circulación de helicópteros, pero como cosa curiosa cuando yo venía caminando a la altura de El Rosal por la autopista, habían dos helicópteros que estaban sobrevolando la marcha, qué me imagino a quien reportaban, pero había alguien que tenía interés en ese momento en particular, de que helicópteros sobrevolaran la ciudad a lo largo de la marcha y me imagino que querían evaluar su magnitud.

Así que para regresar a su pregunta, yo solamente espectáculo, si en el Puente Llaguno ocurrió lo mismo que lo vi en donde estaba, el comportamiento fue aún mas vil. Es todo señor Presidente muchas gracias.

(regreso)                                                                                                             siguiente